Tienes que visitarla sí o sí: la cueva catalana que esconde el primer santuario paleolítico de Cataluña

Cataluña, como zona con diversas sierras y montañas, también tiene sus cuevas. Las hay más discretas y más espectaculares, algunas son directamente minas excavadas por el hombre, otras fueron refugio cuando esta tierra ni siquiera tenía nombre.

Aunque cueste de creer, aún hay rincones en Cataluña que hablan de la prehistoria de este lugar. Espacios sorprendentes por todo lo que cuentan de los pilares de una civilización que, sin ser perfecta, ha evolucionado mucho. Al menos ya no estamos en cuevas.

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Sí lo estaban en la Conca de Barberà, por ejemplo, hace millones de años. Lo demuestra el subsuelo de L’Espluga de Francolí. Bajo las calles de este pueblo, se encuentra una enorme cueva que es un espectáculo visual y un tesoro arqueológico de incalculable valor.

La Cueva de la Font Major es uno de los lugares más insólitos de Cataluña. Esculpido por las aguas del río Francolí, este sistema de galerías subterráneas es uno de los más extensos del mundo formado en roca de conglomerado.

Un tesoro en una cueva

Pero este no es el único aliciente para ir de visita. La cueva no sólo nos habla de la composición de la tierra, sino también de la historia de la humanidad. Y es que, bajo las calles de L’Espluga de Francolí y, concretamente en esa cueva, se halla el primer santuario paleolítico descubierto en Cataluña.

Pocos esperaban dar con este increíble tesoro. Fu un hallazgo, realizado en octubre de 2019 por un equipo del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES), que reveló más de 300 grabados rupestres de hace aproximadamente 15.000 años. 

Detalle de la Cueva de la Font Major GENCAT

Cómo son los restos del paleolítico

Estas representaciones, que incluyen figuras de animales como ciervos, caballos y bueyes, así como símbolos abstractos, se atribuyen al Paleolítico Superior, concretamente al periodo magdaleniense. 

Debido a la fragilidad de los grabados y su ubicación en zonas de difícil acceso, el santuario no es visitable. Sin embargo, los que se acerquen al municipio pueden explorar una recreación detallada de las cuevas en el museo instalado en su interior.

Cómo es la visita

A través de proyecciones sobre las paredes de roca y escenas de teatro virtual, en la Cueva de la Font Major se recrea e ilustra la vida de los primeros habitantes de la región. Todo con un toque de aventura. A los visitantes se les equipa con trajes de neopreno, cascos y linternas para poder adentrarse en las galerías más recónditas de la cueva, siguiendo el curso subterráneo del río Francolí.

Esta actividad, conocida como "Ruta Aventura", permite descubrir formaciones geológicas espectaculares y salas ocultas, todo mientras se aprende sobre la historia geológica y arqueológica del lugar. Para quienes prefieren una experiencia más tranquila, las visitas guiadas estándar ofrecen un recorrido de aproximadamente una hora y cuarto por las secciones accesibles de la cueva.

Cueva de la Font Major COVA DE L'ESPLUGA

Asimismo, la Cueva de la Font Major es accesible para personas con movilidad reducida y carritos de bebé. Eso sí, el recorrido no presenta desniveles significativos y se mantiene a una temperatura constante de entre 14 y 17 grados durante todo el año.

Cuándo ir  y cuánto cuesta

Además, en el exterior de la cueva se encuentra una recreación a escala real de un poblado neolítico, que permite a los visitantes comprender mejor la vida de nuestros antepasados. Estas visitas están disponibles durante todo el año, con horarios habituales de martes a domingo de 10:30 a 13:30 y de 16:00 a 18:00 horas. 

En agosto, el horario se amplía hasta las 19:00 horas. Los lunes, la cueva permanece cerrada. El precio de la entrada es de 8,50 € para adultos, 5,50 € para niños de 5 a 14 años, y gratuito para menores de 5 años. Los mayores de 75 años tienen una tarifa reducida de 7,65 €. Se recomienda reservar con antelación a través de la página web oficial.

Cómo llegar

Para llegar a la Cueva de la Font Major, lo más práctico es ir en coche. Desde Barcelona se va por la autopista AP-2 en dirección a Lleida y se toma la salida 9 hacia Montblanc. Desde allí, se continúa por la carretera N-240 hasta llegar al municipio. El trayecto tiene una duración aproximada de una hora y media.

Una vez en L'Espluga de Francolí, la Cueva de la Font Major se encuentra en la Plaça del Mil·lenari, 1. El sitio cuenta con estacionamiento gratuito.