
Isabel Coixet se pasa al collage CRÓNICA GLOBAL
Isabel Coixet da el salto al mundo del arte y expone una cincuentena de obras en el Museo Thyssen
La directora catalana presenta la primera exhibición de sus collages hechos a través de materiales encontrados
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Isabel Coixet deja las cámaras de cine por un momento y se mete de lleno en el Thyssen. El museo de Madrid ha confirmado que la catalana va a ser la protagonista de su nueva exposición temporal.
Bajo el título de Isabel Coixet. Collages, Aprendizaje en la desobediencia, el centro exhibirá una cincuentena de cuadros que la realizadora ha ido creando en los últimos años, en paralelo con sus películas.
La exposición, comisariada por Estrella de Diego forma parte de la programación de PhotoEspaña 2025 y va a poderse ver en el Museo Thyssen del 10 de junio al 14 de septiembre de 2025.
A pesar de que Coixet lleva años trabajando en estas creaciones, hasta ahora esta faceta pasó totalmente desapercibida para el público. Sólo los más allegados eran conocedores de este otro talento de la directora de Mi vida sin mí.
De las películas a los cuadros
Además de realizar película, la catalana invierte parte de su tiempo en la creación de collages de papeles y fotos que recuerdan mucho a los planos preparatorios que utilizaban algunos directores de Hollywood, que no dejaban nada al azar.
La cineasta apunta a que hay una cierta continuidad entre lo que exige de los espectadores en sus películas y el lugar narrativo donde colocan sus collages a los visitantes. Según cuenta la comisaria, Estrella de Diego, “hay historias que se construyen a base de retazos, de fragmentos”, como las películas de la catalana.

Collage de Isabel Coixet
Un desafío para el público
Como si se tratara de una gran elipsis estática, los cuadros de Coixet “esperan y exigen del espectador el esfuerzo de llenar los huecos que la narración va dejando a su paso para recomponerlas y comprenderlas”, advierte De Diego. “No basta con ver, debe haber un margen para las conclusiones”, remata a la hora de presentar la exposición de Coixet.
Tal y como expresan los responsables del Museo Thyssen, las obras de la realizadora conectan con la gran tradición vanguardista del género que van de Hanna Höch a Kurt Schwitters. Asimismo, una técnica como la del collage parece vincular a Coixet “con una cierta precariedad, con ese modo de trabajar con poco que, de alguna manera, la realizadora persigue también en su cine”.
La fuente de inspiración de Coixet
La misma realizadora asegura que su fuente de inspiración y “todas las cosas que he hecho en la vida se nutren de todas las cosas que he visto, he sentido, no he sentido, me han cabreado, jodido, flipado, hasta las que me han dejado indiferente”. Y de allí ha llegado al collage.
Coixet apunta que esta técnica “es la manera de apropiarse de las que te dejan indiferente que son los espacios entre las cosas”. Pero llegar hasta el Thyssen no ha sido un juego, sino fruto del esfuerzo que le ha hecho sentirse cómoda con esta técnica, que no ve tan alejada del cine.

Collage creado por Isabel Coixet
Sin miedo a nada
“Voy perdiéndole miedo al collage, a juntar cosas que no tienen nada que ver y que también expresan algo que para mí es mágico y que tiene que ver con el hecho mismo de hacer películas, que es cómo conviven en un mismo espacio las pinturas de spray de la tienda de skaters de mi barrio, fotos conseguidas en un álbum comprado en un mercadillo en Nantes o en Siberia y fragmentos de la vida cotidiana. Que esas cosas tengan sentido depende de tu valentía y de poca cosa más”, añade la cineasta.
Así, entiende que “los recortes no es aquello que estamos recortando, si no aquello que queda alrededor”, apunta. De esta manera, y en palabras de la escritora y ensayista Laura Ferrero, “Isabel Coixet reimagina y reconfigura objetos encontrados y fotografías antiguas en obras de arte contemporáneas únicas y meticulosamente deconstruidas”. Y lo hace de tal forma que “al hacer que el original sea casi irreconocible, abre la obra a nuevas posibilidades de narrativa e interpretación”, concluye.