El repunte de los delitos sexuales ensombrece la caída general del crimen en Cataluña

Es un hecho innegable: la delincuencia en Cataluña ha disminuido un 6% durante el primer trimestre de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior. No obstante, los delitos contra la libertad sexual rompen la tendencia. Así se extrae del índice de criminalidad que publica trimestralmente el Ministerio de Interior, elaborado a partir de las estadísticas que remiten todos los cuerpos policiales del Estado. 

Una bajada significativa que se extiende a los ciberdelitos, que caen un 15,6%, y a los delitos contra el patrimonio, que registran sus mejores cifras de los últimos años.

Desde hace tiempo –sin contar el paréntesis anómalo de la pandemia– Cataluña no experimentaba un descenso tan notable en sus índices de criminalidad.

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Bajan los robos y las estafas 'online'

El retroceso más relevante se produce en los delitos contra el patrimonio, especialmente en hurtos y robos con violencia o intimidación. Estas dos categorías, que desde hace unos siete años se han consolidado como el talón de Aquiles de la seguridad en Cataluña, han sido responsables en buena parte del incremento global de la criminalidad, muy especialmente en la ciudad de Barcelona.

Si vamos al detalle de los datos, los robos con violencia e intimidación han bajado un 9,7% en toda la comunidad, pasando de 5.854 denuncias en el primer trimestre de 2024 a 5.287 en 2025. En cuanto a los hurtos, la reducción es casi simbólica, un 0,1%, pero sigue la tendencia general a la baja.

Imagen de archivo de un ladrón callejero atrapado por agentes de la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra Cedida

Ciberdelitos

También caen con fuerza los ciberdelitos, en especial las estafas informáticas, que bajan un 19,2%. En total, se han registrado 16.768 denuncias frente a las 20.760 del mismo periodo del año pasado.

Aun así, la amenaza sigue siendo elevada: en Cataluña se interponen cada día más de 186 denuncias por fraudes cometidos en el entorno digital.

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Las fuentes consultadas plantean el debate que se repite cada año: ¿bajan realmente los delitos o desciende el número de denuncias? Desde fuentes oficiales se confía en que los planes de prevención, especialmente aquellos dirigidos contra los delincuentes multirreincidentes, estén empezando a dar resultados muy positivos.

Un ejemplo de ello, dicen, es el Pla Kanpai, la nueva fórmula para combatir la delincuencia reincidente dentro y fuera de Barcelona.

Delitos sexuales al alza

Pero no todo son buenas noticias. Los delitos contra la libertad sexual han experimentado un preocupante repunte del 12,5%, al pasar de 902 denuncias en el primer trimestre de 2024 a 1.015 en 2025. La modalidad que más crece es la de las agresiones sexuales con penetración, que suben un 26,8%: de 332 a 421 casos denunciados. 

Este mismo debate también se traslada a esta tipología penal: ¿hay más agresiones o se denuncia más? Una cuestión difícil de responder pero que, sea cual sea la realidad, deja una evidencia clara: las cifras totales siguen presentando un grave problema estructural. 

Imagen de archivo de la Unidad de Investigación de los Mossos d'Esquadra Mossos d'Esquadra

Aun así, fuentes expertas en la lucha contra la violencia sexual y de género señalan que cada vez son más las mujeres que se atreven a verbalizar los abusos y violaciones. El mayor acceso a recursos de apoyo, la creciente sensibilización sobre la violencia sexual, y la creación de protocolos de denuncia más accesibles son algunos de los factores que influyen a la hora de tomar la decisión de presentar una denuncia.

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Una tendencia generalizada

En Barcelona, los delitos contra la libertad sexual aumentan un 16,3%, y los casos de agresiones con penetración lo hacen un 19%. Sólo en la capital catalana se han contabilizado 119 denuncias por esta tipología delictiva, lo que equivale a más de una agresión al día entre enero y marzo de este año.

El resto del territorio tampoco escapa al aumento. En Girona, los delitos contra la libertad sexual se disparan un 114,3%, con 30 denuncias en total, ocho de ellas por agresiones con penetración. En Tarragona también suben un 21,4%, mientras que en Lleida se registra una caída puntual del 31,8%.

Imagen de archivo de una detención por parte de los Mossos d'Esquadra EUROPA PRESS

Turno desbordado 

Tal como ha informado este medio en anteriores ocasiones, abogados del turno de oficio en Barcelona advierten de que la mayor parte de las urgencias que atienden tienen que ver con delitos contra la libertad sexual. 

Es más, la publicación de estos datos coincide con el anuncio por parte del ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, y el conseller de Justicia y Calidad Democrática, Ramón Espadaler, de trabajar en la puesta en marcha de cuatro nuevos juzgados de violencia sobre la mujer en Cataluña.

Con la entrada en vigor de la Ley Orgánica de Eficiencia Judicial, los actuales órganos unipersonales se transformarán en tribunales de instancia estructurados en secciones, lo que permitirá una mayor especialización.

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Entre estas secciones, destacarán aquellas centradas en violencia sobre la mujer, que no sólo reforzarán sus competencias actuales, sino que también asumirán el conocimiento de los delitos de violencia sexual. Esta ampliación implicará un notable aumento en la carga de trabajo.

Imagen de archivo de una sala de vistas de la Audiencia Provincial de Barcelona EUROPA PRESS

Una justicia más especializada

En este contexto, el Ministerio de Justicia trabaja en un proyecto de real decreto que contempla nuevas plazas de magistrado en secciones especializadas en violencia sobre la mujer y en violencia contra la infancia y la adolescencia, dentro de distintos tribunales de instancia.

En Cataluña, el plan incluye una sexta plaza en la sección de violencia sobre la mujer de Barcelona, una segunda en la de L'Hospitalet de Llobregat, y una nueva demarcación que agrupará los partidos judiciales de Lleida, Balaguer y Cervera, con una segunda plaza de magistrado.

También está prevista una nueva plaza en la demarcación de Vilanova i la Geltrú–Vilafranca del Penedès, además de una nueva sección especializada en violencia contra la infancia y la adolescencia en el Tribunal de Instancia de Barcelona.