El legado de Aragonès (ERC): un informe favorable a la gestación subrogada subleva a las abolicionistas

Días después de que el Gobierno decidiera limitar la gestación subrogada --lo que se conoce popularmente como vientres de alquiler--, el Comité de Bioética de Cataluña (CBC) emitió un informe, elaborado a petición del Govern de Pere Aragonès, en el que se proponía legalizar esta práctica.

Si bien es cierto que desde el comité matizan que debería de prohibirse la participación de intermediarios y cualquier compensación económica, este informe ha caído como un jarro de agua fría en el sector más abolicionista de Cataluña, que no entiende "por qué vamos en dirección contraria al resto de Europa". 

En este sentido, la abogada feminista y especialista en Derechos Humanos Núria González --una de las figuras referentes en la lucha por la abolición de los vientres de alquiler--, lamenta que tanto Junts como ERC se hayan mostrado tradicionalmente favorables a esta práctica.

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Las políticas de Junts y ERC

Es más, González, autora del libro Los vientres de alquiler: la mala gente, recuerda que el partido de Pere Aragonés, junto al PNV, fueron los únicos que, en 2017, apoyaron la propuesta de ley presentada por Ciudadanos que pretendía regular la gestación subrogada en España. 

Y añade que en Junts siempre se han mostrado abiertamente a favor de los vientres de alquiler: "Es difícil olvidar que, desde la Generalitat, en la era de Quim Torra, Puigdemont y compañía, se ofreció asesoramiento a las personas interesadas en recurrir a la gestación subrogada. Un servicio que se brindaba a través de la conselleria de Familia". 

Una mujer embarazada, en una imagen de archivo PEXELS

Según la abogada, el Govern de Pere Aragonés pidió este informe al Comité de Bioética de Cataluña "porque su intención era seguir impulsando políticas que favorecieran a los vientres de alquiler".

Ahora, sin embargo, "la jugada les ha salido bastante mal", ya que tanto el Ejecutivo central como el de Salvador Illa se han mostrado tajantemente en contra de esta práctica que, además, está prohibida en España desde 2006.

Prohibición global

Para Núria González sólo existe una solución: "la prohibición absoluta en todo el mundo". Por un lado, celebra la reciente limitación de las inscripciones en los consulados españoles de los bebés nacidos por gestación subrogada en el extranjero; pero, por otro lado, lamenta que aún existan excepciones.

"Se sigue permitiendo inscribir a los recién nacidos con relación genética, por lo tanto, aunque es un avance, seguirán existiendo casos". Para González, la única solución pasa por crear una norma universal que prohíba esta práctica en todos los países: "Aunque en España esté prohibida, si en otras partes se permite, siempre se buscará la forma de acceder a los vientres de alquiler".

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Recuerda que el Tribunal Supremo, en múltiples ocasiones, ha concluido que la gestación subrogada "va en contra de los derechos humanos de las mujeres y de las criaturas [...]; en cambio, en Cataluña, un Comité de Bioética dice que no es tan malo como parece...", ironiza. 

Feministes de Catalunya contraataca

Al posicionamiento y a la reivindicación de González se suma el colectivo Feministes de Catalunya, que ha emitido un comunicado en respuesta al citado informe, expresando su "profunda decepción y preocupación" por el reciente posicionamiento del Comité de Bioética. 

En una carta dirigida personalmente al presidente del CBC, Màrius Morlans, la plataforma rechaza el planteamiento del comité, que intenta desvincular el proceso de gestación de sus implicaciones biológicas, psicológicas y sociales. Además, insisten en que muchas mujeres que acceden a la gestación subrogada lo hacen por necesidad económica, por lo que hablar de "libertad" oculta una realidad de explotación.

Manifestación de la Coordinadora 8M Moviment Feminista de Barcelona EFE/ Quique García

Critican, asimismo, que el informe deshumaniza el vínculo materno-filial al considerar a la mujer un mero recipiente. "La separación del recién nacido de la gestante es, para ellas, un acto traumático equiparable a una forma de violencia", se lee en la carta de Feministes. 

"Altruismo" bajo sospecha

También se oponen de forma tajante al "modelo altruista" que plantea el CBC. Consideran "hipócrita" hablar de altruismo cuando hay una compensación económica implícita y una carga para el sistema público de salud, que acabaría costeando estos procesos.

Asimismo, la asociación no duda en señalar un posible conflicto de intereses tras la publicación del informe, y denuncia que varios miembros del grupo de trabajo del CBC "tienen vínculos con clínicas de reproducción asistida".

El último avance legislativo

Como ya adelantaba González, este informe contradice la voluntad del Gobierno central que, recientemente, ha prohibido que los nacidos por gestación subrogada sean inscritos en los consulados españoles en el extranjero, aún cuando exista resolución administrativa o judicial favorable en el país de origen.

Embajada de España en Alemania Shutterstock

Hasta ahora, las familias que recurrían a esta práctica podían inscribir a los bebés en los consulados. La norma se ha endurecido, tal y como reclamaban varios sectores, y aunque los niños nacidos mediante gestación subrogada podrán seguir viajando a España, sus padres de intención deberán obtener los documentos correspondientes —pasaporte y permisos— de las autoridades locales.

Una vez en territorio español, deberá iniciarse el proceso de filiación por los cauces ordinarios previstos en el ordenamiento: ya sea por vínculo biológico con uno de los progenitores o por adopción, siempre que se pruebe la existencia de un núcleo familiar con garantías suficientes.