Tarragona fracasa por segunda vez en la venta de una finca clave para vivienda social en Vall de l'Arrabassada

El Ayuntamiento de Tarragona, a través del Servei Municipal de l'Habitatge i Actuacions Urbanes SA (SMHAUSA), ha vuelto a fracasar en la venta de una finca ubicada en la calle Joan Fuster, 21, en Vall de l'Arrabassada (Tarragona), con la que pretendía obtener fondos para construir viviendas sociales. 

La entidad ha sacado el inmueble a subasta por segunda vez, pero nuevamente ha declarado desierto el proceso al tumbar la única propuesta recibida por problemas técnicos y formales con la empresa postora, SPV Horta Cambrils 8 SL, domiciliada en Zaragoza.

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Primera incidencia

En abril pasado, SMHAUSA anunció la segunda subasta con un presupuesto base de licitación de cerca de tres millones de euros sin IVA para hacerse con un terreno urbano de 2.669 metros cuadrados, libre de cargas y con potencial para el desarrollo de viviendas plurifamiliares. 

Tras la apertura del plazo, la pyme presentó la documentación correspondiente el 8 de mayo de 2025. Sin embargo, la mesa de contratación detectó un problema técnico: la propuesta económica y la declaración responsable no podían abrirse por un "error de archivo".

Nueva entrega

Ante la incidencia, el caso fue trasladado a los servicios de contratación de la Administración Abierta de Cataluña, que confirmaron la posibilidad de pedir de nuevo la documentación. SPV Horta Cambrils 8 recibió un plazo de tres días hábiles para enmendar los archivos. 

Además de estos, la postora aportó un informe elaborado por un perito tecnológico particular, que concluyó que la empresa sí realizó “una tentativa válida" de presentación de la documentación. Este defendió que el proceso no pudo completarse debido a un fallo de validación en la plataforma, y no por "falta de voluntad" por parte de la empresa, según se desprende del acta.

Dudas sobre los archivos 

Aún así, SMHAUSA ha decidido esta semana anular la subasta debido a que los nuevos archivos de SPV Horta Cambrils no coincidían digitalmente con los presentados inicialmente. Las improntas electrónicas --una especie de 'huella digital' de cada archivo-- eran diferentes, lo que generó dudas sobre la integridad de la documentación.

En este contexto, la entidad no ha podido enajenar la finca porque no pudo confirmar con certeza que los documentos presentados fuera de plazo correspondieran exactamente a los entregados inicialmente.

Primer concurso

En julio de 2024, el Ayuntamiento de Tarragona lanzó un concurso público para la venta de la propiedad, con el mismo presupuesto de licitación. 

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Para atraer posibles compradores, el Consejo de Administración de SMHAUSA no solo aprobó una prórroga de 15 días para presentar las ofertas, sino que también facilitó documentos adicionales, como una tasación y un informe geotécnico. 

Pese a los esfuerzos, el consistorio terminó por declarar desierto el proceso en diciembre del año pasado.

Vivienda pública

Este tema se produce en un momento en que Tarragona continúa ampliando su parque de vivienda pública. Así, SMHAUSA aprobó este jueves la adquisición de un edificio de cuatro plantas que se destinará a alquiler social, según recoge el Diari Més.

El inmueble es un bloque plurifamiliar que cuenta con dos pisos de 84 metros cuadrados y seis más amplios de 110 metros cuadrados. Aunque la finca supera el siglo de antigüedad, diversas reformas han permitido mantenerla en buen estado de conservación.

Los apartamentos serán asignados como viviendas de protección oficial, aunque también podrán utilizarse para cubrir situaciones de emergencia económica y social.