Así vivió un padre de familia el atropello de Cornellà-El Prat desde dentro: "Bajó por Sant Jeroni y se metió entre la multitud"

Es el atropello junto al RCDE Stadium de Cornellà-El Prat de ayer desde dentro. Un testigo presencial, un padre de familia que se encontraba entre los aficionados del Espanyol que accedían al coso blanquiazul para presenciar el partido de La Liga frente al eterno rival, el FC Barcelona, relata que vio la secuencia completa del arrollamiento múltiple, que se ha saldado con 16 heridos y la conductora, detenida. 

"Estábamos accediendo al estadio, ya casi en la puerta, cuando escuchamos gritos e improperios. Pensábamos que se trataba de un culé que había venido a provocar", admite. El aficionado precisa que la conductora bajó por la calle Sant Jeroni de Cornellà, perpendicular al recinto, y, en lugar de girar a la izquierda, donde no había personas, "giró a la derecha". 

"Algo inusual, porque ese trozo de vía pública está cortado en días de partido al estar atestado de gente, y el tráfico solo se autoriza para vehículos especiales, los de emergencias", narra. 

Atropello

En ese momento, hubo un primer golpe a una chica, y la gente "empezó a zarandear el coche y a golpearlo". El fan subraya que el incidente se estaba produciendo "no donde se reúnen los más radicales", sino donde se encontraban "los aficionados normales". 

Entre ellos, este perico y sus hijos, que se disponían a acceder al estadio para presenciar el match en el que, a la postre, el Barça se coronaría campeón de La Liga. 

"Pensábamos que había muertos"

El ciudadano detalla la escalofriante confusión que siguió al acelerón del automóvil, un Peugeot 3008. "Escuchaba los cuerpos de la gente golpear contra el vehículo: plop, plop. Pensaba que había muertos. Parecía una película", rememora. 

Además, el hombre y su retoño quedaron atrapados entre las cargas que tuvo que hacer la Brigada Móvil de los Mossos d'Esquadra para apartar a los aficionados del automóvil, que quedó empotrado en una rampa. 

"No encontraba a mi hijo, pero estaba bien. Luego, él bromeaba que el perdido era yo: un anciano desorientado entre la multitud".

"Pudo haber una masacre"

La fuente recalca que "él estaba a unos cuatro metros del coche", por lo que su testimonio es "directo". Su narración mezcla elementos trágicos y cómicos, como el hecho de que su hijo le "echaba bronca porque estaba al teléfono cuando ya habían atropellado a gente y los mossos estaban dando golpes". 

Fueron momentos de "mucha tensión", porque "pudo haber una masacre". Finalmente, no la hubo, aunque sí 16 heridos de diversa consideración, ninguno de ellos grave. 

La policía catalana enfatiza que el suceso fue "accidental", aunque ha detenido a la automovilista para esclarecer el suceso. Desde dentro se vivió de otra manera. Baste escuchar y ver el vídeo que aporta el aficionado, en el que otra de las presentes, sollozando, alerta de que la conductora "ha matado a gente". Finalmente, no fue así, y los lastimados son de menor gravedad.