
Lamine Yamal posa en las instalaciones de la Masía FCB
El feo de una joya de la Masía para fichar por el Real Madrid: rajada del Barça
Un exjugador barcelonista reniega de su pasado y hace méritos para jugar en el gran rival
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Alejandro Grimaldo iba para futbolista del Barça. Era uno de los mejores jugadores de la cantera azulgrana, hace una década. Parecía que era el relevo ideal de Jordi Alba, pero Luis Enrique frenó su ascenso al primer equipo, no se sabe bien si por motivos deportivos o de índole más personal.
Hoy, Grimaldo juega en el Bayer Leverkusen y está en el punto de mira del Real Madrid. Su fichaje es una petición de Xabi Alonso y el defensa tiene muchas ganas de jugar en el Bernabéu. Tantas que reniega de su pasado barcelonista.
La confesión
"Si mis padres pudieran volver atrás, nunca me hubiesen dejado ir a Barcelona", ha comentado Grimaldo en una entrevista concedida a El Chiringuito. "Al final, padres e hijo pierden mucho. Ellos lo pasaron mal y yo también. Estando solo, maduras, pero te pierdes muchas cosas de la familia", ha añadido Grimaldo.

Alejandro Grimaldo y Xabi Alonso celebran una victoria del Bayer Leverkusen EFE
El futbolista español ha recalcado: "Algunos momentos no fueron fáciles, pero estoy contento de la decisión que tomé porque me hizo madurar y crecer".
Frenar a Lamine
Grimaldo, curiosamente, había manifestado otros años que tenía ganas de regresar a Barcelona. Ahora reniega del pasado y se deja querer por la afición madridista. Sabe, también, que Xabi Alonso busca un lateral de primer nivel para frenar, o intentarlo, a Lamine Yamal, la gran estrella del Barça.

Xabi Alonso, entrenador del Bayer Leverkusen EFE
Esta temporada, Grimaldo, de 29 años, ha disputado 48 partidos con el Bayer Leverkusen en los que ha marcado cuatro goles y ha dado 13 asistencias. Tiene contrato con el club alemán hasta junio de 2027 y su valor de mercado, según Transfermarkt, es de 40 millones de euros. El Madrid lo quiere, pero su presidente, Florentino Pérez, quiere bajar el precio para poder dar otra alegría a Xabi Alonso.